Hola Lilita
Alejandro Borensztein
No sé si ya fuiste a misa o pensabas ir a la tarde. De ese tema, como te podrás imaginar, entiendo poco y nada: mis conocimientos eclesiásticos se agotan en que vos no vas a la misa del Angelus para no cruzarte con Angelici.
Supongo que tu combo dominguero es desayuno / diarios / ravioles / siesta / misa / Majul. Yo hago más o menos lo mismo, reemplazando misa por Boca. Por eso, sé que el domingo a la mañana es un buen momento para reflexionar.
Antes que nada, quiero que sepas que todos te queremos mucho. Y que tenés razón. Siempre tenés razón. Hace 20 años que tenés razón. Desde aquella Banelco a este Lázaro, no erraste una. Te amamos.
Sin embargo, necesitamos que te calmes un poquitito. Recién arrancamos, Lila. Es un gobierno joven, flamante. En ablande. No me lo arruines de entrada, Mamu.
Los logros los conocemos todos: recompusieron la política exterior, levantaron el cepo, cerraron el problema con los buitres, voltearon el memorándum con Irán, más profesionalismo a la gestión, menos ñoquis, y sobre todo este nuevo y saludable clima de adultez política que reina en el país, con excepción de los grandes líderes populares que luchan contra esta dictadura como Sabbatella o Artemio López.
Pero después está la parte en que la cosa trastabilla un poco, como pasa en todos los gobiernos. Ahí necesitamos que seas un cachito más cariñosa. Aunque sea por un tiempito, Lili.
Por ejemplo, está claro que no votamos a este gobierno para reemplazar a Julián Alvarez, el demócrata de La Cámpora que apretaba jueces y fiscales, por Angelici.
Pero hay momentos y momentos para decir esas cosas. No me malinterpretes. No te pedimos ni complicidad, ni obsecuencia, sólo una cucharadita de astucia piadosa.
Cuidemos al Presidente, Lilina mía. Hicimos mucho para que el Compañero Mauri gane las elecciones. Yo, vos, Lanata, Cristina, Aníbal, La Cámpora, Zannini, todos trabajamos duro para la derrota del Frente para la Victoria (pensar que en el PRO todavía creen que fue Durán Barba). No tiremos tanto esfuerzo mancomunado a la basura.
Lo que haya que corregir (y vaya si lo hay), hablémoslo con cierta reserva, sin tanta vehemencia. De última, si hay que putearlos por alguna cosita, repartámonos un poco la tarea.
Si vos querés, yo me ocupo hoy mismo de llamarlo al Compañero Mauri y decirle de frente manteca que hasta ahora está todo muy bien, que muy lindo, que muy eficiente, que estuvo todo muy rico, que muchas gracias, pero que lo del helicóptero y la casa del amigo Lewis se acabó. No va más, macho. Por cosas parecidas, nos la pasamos puteando a tantas estrellas del kirchnerismo. Por supuesto, no es lo mismo pasar el finde en la casa de un viejo amigo extranjero como Lewis, que pasar un finde en la casa de un nuevo amigo del rioba que ligó todos los negocios con el Estado. Pero siempre hay un riesgo. Podría pasar que un día salte que alguna de las tantas empresas de Lewis está metida en una licitación o involucrada en la compra de algo. O lo que sea. Y el quilombo será inevitable.
Y esto vale para todos los funcionarios del gobierno. Excepto por razones humanitarias, como puede ser un colon irritable, está prohibido usar aviones privados. Los aviones privados siempre son de alguien. Y, salvo que sea el avión de Luis Miguel, siempre es de alguien que tiene intereses con el Estado. Lamento avisar que es incompatible con la función pública. No sacamos a los truchos del gobierno anterior para hacer esta cosas.
De última Lila, lo puedo asustar al Compañero Mauri contándole lo que le pasó a Christian Wulff, el presidente alemán destituido en el año 2011 por aceptar pasar un finde en la casa de su amigo David Groenewold que era productor de cine y había recibido un crédito del gobierno para hacer una película.
Parece exagerado. Pero si nosotros hubiéramos tenido el rigor de los alemanes, toda la plana mayor del kirchnerismo ya estaría veraneando en Alcatraz. Punto, de este tema me ocupo yo. Olvidate.
Lo de hacer justicia con la corrupción kirchnerista es todo tuyo, cariño. Ahí dale para adelante. Ver presos a los responsables de tanto choreo es una de la razones por las que el pueblo tolerará el esfuerzo que hay que hacer para reparar el descalabro.
Pero que Nico Caputo, el amigo del Presidente, haga obras con el Estado es un problemita que deberíamos hablarlo en la intimidad, sin levantar tanta polvareda. No hace falta ir a lo de Majul. Se le explica al Presidente que mejor no, que le pida un par de años sabáticos y listo. Y si Caputo necesita generar algo para sus gastos diarios, que labure para el Estado uruguayo o se abra una panchería, como hicieron Moreno y Milani. A propósito, la de ellos se va a llamar Tio Tola. Raro, ¿no? Yo pensé que le iban a poner “Salchichas El Apriete” así tenían la publicidad resuelta. Pero se ve que estos tipos no tienen olfato comercial.
La otra razón por la que el pueblo puede bancarse los aumentos no es haciéndolos más graduales, como pediste públicamente, sino más equitativos. Explicarle esto al Presidente requiere de mucho tacto. Ahí tenemos que pedir ayuda, por ejemplo, a alguno de los más sesudos que tenga la Unión Cívica Radical, o en lo que queda de ella. Un Sanz, un Terragno podrían convencer al Compañero Mauri de que el esfuerzo también lo deben hacer las clases media alta y alta.
No creo que mis amigos que viven en Le Parc estén muy preocupados por el hecho de que el bondi aumente el 200% o la luz el 300%. Habría que obligarlos a hacer un esfuerzo equivalente al que hacen los pobres así estos, por muchos que sean, no se sienten tan solos.
Tal vez anticipando el impuesto a las Ganancias del 2018 y el 2019. O dejando todas las mañanas en la puerta del Banco Central una rueda del Audi. No sé. Algo que les duela tanto como le duelen los aumentos a una familia que gana 10 lucas por mes. Equidad es lo que le va a dar sentido patriótico al esfuerzo, y evitar que se arme la podrida. Pero resolvamos este problema con muñeca, Muñeca.
Yo sé que controlar la honestidad brutal va contra tu naturaleza. Pero es el momento de ser sabios, Li.
Se dice que los gobiernos rinden examen. A Ex Ella, el examen se lo tomaban Larroque, Diana Conti, D’Elía y todos los aplaudidores. Mesa fácil. Le ponían siempre 10.
En cambio a Macri, le tomás examen vos que bochas a todos. Por favor, ablandame ese corazón.
Calma Lila. Has sido una antorcha en la oscuridad de la decadencia nacional. No te me apagues nunca por favor. Pero tampoco nos quemes el rancho.
Buen domingo, Mamu. Besito.
@nib@l 2018