Cómo entender lo que ocurre actualmente en Carrefour
En el medio del atolladero en el que se encuentra Carrefour, el Gobierno encontró una solución paupérrima para los empleados, aunque la única que sería viable para el sostén de la empresa.
Sin embargo desde el Ministerio de Trabajo, hace solo unas semanas, habían anunciado que “en la empresa no va a haber despidos”, algo que al día de hoy se sabe, no es verdad.
El PPC (Proceso Preventivo de Crisis) que impulsó el Gobierno, fue firmado ayer entre Carrefour y el Sindicato de Comercio, lo cual, además de ser una pésima noticia para los 19 mil trabajadores de la cadena de mercados, es un antecedente históricamente infausto para la sociedad laboral en la Argentina.
No obstante, la decisión del oficialismo, la cual durará hasta el 2021, acarrea: mil retiros voluntarios con una indemnización al 150%; una disminución en los haberes mensuales sobre la base de las paritarias, lo cual sería una especie de ajuste que no disminuye el sueldo, sino que directamente no lo aumenta; cierre de sucursales con licencia abierta para suspensiones o despidos, lo que quiere decir que los locales funcionaran y mantendrán al personal siempre y cuando funcione vigorosamente y no genere perdidas monetarias; se reducirán un 50% los aportes patronales y se exhorta “paz social”, lo que implicaría que no se generen marchas, protestas y/o disturbios por parte de los trabajadores.
Dicho acuerdo, no fue de fácil consenso, tuvo varias postergaciones tras disidencias de quienes luego lo firmarían, a saber: el titular de la cartera de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca; el secretario general del gremio de Comercio, Armando Cavalieri; y por parte de la empresa, el CEO de la cadena, el francés Rami Baitiéh.
El PPC tendrá validez hasta el 31 de marzo del 2021, e inicia bajo un eufemismo:“adecuación Salarial”. Según se desprende del acuerdo “habiéndose denunciado las condiciones más favorables respecto de la ‘escala de remuneraciones básicas’ del CCT (Convenio Colectivo de Trabajo) Nº 130/75 que venían percibiendo los trabajadores encuadrados en este, hayan sido acordadas colectiva o individualmente, de forma unilateral o por convenios de partes, se impone la necesidad de adecuar para el futuro las remuneraciones del personal empleado por INC SA encuadrado bajo el CCT Nº 130/75.-”
Es dable aclarar que el PPC es un mecanismo de negociación avalado por el capítulo 6 de la Ley 24.013 (Ley de Empleo), para compañías en crisis que prevén despidos por causa de fuerza mayor, aplicable a empresas con más de mil empleados en las cuales se pueden desvincular hasta el 5% de ellos.
A estas alturas, Carrefour ya logró que mil de sus empleados se retiren voluntariamente con sus respectivas indemnizaciones por antigüedad de hasta el 150%; el ajuste de los salarios sobre la base de paritarias únicamente sobre el básico por los 3 últimos años; la posibilidad del cierre de locales simplemente con aviso al Ministerio con mantenimiento de puestos de trabajo si es que se mantiene “un equilibrio sustentable en la dotación de cada sucursal”; y un ahorro multimillonario a través de la reducción del 50% de los aportes patronales.
El acuerdo Triaca-Cavalieri-Baitiéh pretende garantizar la “Paz Social” a la empresa. Los delegados, más específicamente los que se encuentran afines al sector disidente al oficialismo, es decir que responden a Ramón Muerza, “están furiosos”.
Dicho sea de paso, hoy se hicieron escuchar los tambores en protesta, la “paz social” que patrocinaban desde Carrefour, el gremio y el Gobierno, se quebró.
Lo que está sucediendo en estos momentos en la cadena de mercados, es que están respondiendo a un plan estratégico, ideado por la casa Nº1, llamado “Carrefour 2022”, el cual pretende menguar la cantidad de sucursales para convertirse en líder en comercio digital.
En el sector Comercial, el cual brinda puestos de trabajo a más de 100 mil personas en todo el país, corre cierto temor de que exista una especie de “efecto contagioso”que culmine por dejar a miles de empleados desocupados.
@nib@l 2018