De Cristóbal Colon a Fidel Castro
El Caribe frontera imperial
La historia del Caribe es vista por Juan Bosch como una concatenación de hechos; como un desplazamiento de fuerzas. Primero desde la Europa moderna en su afán de acumular riquezas, que tiene como resultado el desarrollo de los Estados modernos, de las luchas de esos imperios por el dominio de fuentes de materia prima; por la imposición de un sistema que generaba una plusvalía absoluta, como la esclavitud y como, en fin, una reacción a esas fuerzas que se van trasformando en una cadena de revoluciones y levantamientos. La última etapa de esa historia es para Bosch, la revolución de Cuba y el heredero de todas esas acciones y el último gran actor en este escenario, es el imperio estadounidense.
En fin, Juan Bosch se vale de los textos históricos para pensar el pasado con la meta de orientar su acción política. No es el esfuerzo de Bosch una simple actividad académica, ni un trabajo de investigación en los archivos. La grandeza de su obra no puede verse alejada de su capacidad de narrar y de su interés político que es explicar y explicarse el pasado como espacio imaginario recuperable para la acción política. En los textos históricos de Bosch, como en su obra narrativa, se demuestra el aserto de Paul Ricoeur al estudiar la narratividad: que el texto es un buen paradigma para la acción y la acción es un excelente paradigma para el texto. En Bosch, como hombre ilustrado, la acción no podía dejar de estar acompañada al texto, así que lo que veía en la vida lo convertía en narración y lo que pensaba también partía de una narratividad que orientaba la acción política.