El demonio bajo mis pies
Iván es un hombre a punto de cumplir 50 años. Trabaja como comercial y disfruta de una vida estructurada que comparte con sus compañeros de trabajo y con su madre, enferma de Alzheimer, a quien va a visitar sin falta a la residencia de ancianos. Nadia es una de las colegas; amante ocasional y secreta que forma parte de su rutina. Ambos tienen una atracción sexual que satisfacen algunos fines de semana en el ático de él, y mantienen una relación sin lazos afectivos serios. Esta circunstancia no evitará que los celos aparezcan cuando Estel, una compañera mejor posicionada en el trabajo y más joven que Nadia, intente seducir a Iván en su fiesta de cumpleaños el fin de semana antes de que lo echen del trabajo. La muerte de la madre de este tres meses antes, así como el despido inesperado, desmontarán la estabilidad económica y emocional de Iván poco a poco y lo transformarán en una persona invisible y vulnerable. Así, los sentimientos hacia las dos mujeres junto con el comportamiento insólito y las sorprendentes revelaciones del vecino de abajo del ático regirán la vida del protagonista durante el declive hasta su desahucio. Entonces, comenzará un periplo accidentado en la calle que le sumergirá en un mundo absurdo y lo llevará a vivir situaciones arriesgadas cuando intente darle sentido a su existencia.
A pesar del espíritu luchador de Iván, el miedo a la pérdida, el temor a no cumplir con las expectativas de los demás y el pánico a envejecer se configurarán como verdaderos obstáculos para la supervivencia en el sino de una sociedad egoísta, superficial y aporofóbica.